Declaraciones de expertos en el tema nos relatarán que el valor del Ferrocarril de Antioquia consistió principalmente en que este territorio era demasiado quebrado geográficamente, y la construcción de líneas férreas en semejante terreno representaba un gran reto para la tecnología de finales del siglo XIX. La idea era comunicar a Medellín con el río Magdalena, porque era la vía comercial del país para las actividades de importación y exportación.

En esa época el Estado Soberano de Antioquia había mejorado su economía minera, y se colocaba como el primer productor de oro; aunque la agricultura, la ganadería y la industria permanecían en un bajo nivel de desarrollo.